El aguacate, además de encantarme, es muy versátil. No solo lo puedes añadir a las ensaladas y bocadillos, sino que también se pueden hacer postres sabrosísimos con esta fruta. Lo que más me gusta de esta tarta es el sabor inesperado que tiene, un refrescante toque de limón junto a la cremosidad del aguacate.
Si a ti también te gusta el aguacate, seguro que ya se te está haciendo la boca agua, así que ¡no me enrollo más y te cuento la receta!
RECETA DE TARTA HELADA DE AGUACATE
Ingredientes
Ingredientes para la base de galleta:
- 1 paquete de galletas tipo Maria
- 50 g de mantequilla aprox.
Ingredientes para la tarta helada:
- 1 y ½ taza de nata para montar bien fría
- 2 aguacates grandes
- ½ taza de zumo de limón
- ¾ taza de azúcar
- 175 g de queso cremoso tipo Philadelphia
Elaboración paso a paso
Elaboración para la base de galleta:
- Moler las galletas con una batidora o machacarlas en el mortero hasta que queden granos más o menos finos (cuanto más finos, más fácil será que quede consistente)
- Mezclar con la mantequilla fundida con una espátula, de manera que queden bien impregnadas de mantequilla.
- Extender la mezcla sobre el fondo de un molde desmoldable, procurando que quede bien compactada y lo más lisa posible. Esta capa puede ser el espesor que quieras, yo te recomiendo que sea de medio centímetro, más o menos.
- Meter el molde en la nevera mientras preparas lo demás.
Elaboración para la tarta helada:
- Montar la nata.
- Ir añadiendo el azúcar poco a poco mientras sigues batiendo la nata y reservar.
- En otro bol, poner la pulpa de aguacate y el queso y batir hasta que quede bien cremoso.
- Añadir el zumo de limón y volver a batir.
- Ahora es el momento de añadir esta crema de aguacate a la nata, y mezclar bien con una espátula.
- Una vez bien mezclado, meter en el congelador por unos 30 minutos. Pasado este tiempo, sacarlo y volver a mezclarlo.
- Repetir esta operación unas 3 o 4 veces. Con esto conseguirás que la textura quede muy cremosa y suave, como de helado.
- Por último, viértelo sobre el molde con la base de galleta y mételo de vuelta al congelador por al menos 2 horas hasta que llegue el momento de servirla.
- Para tomarla bien fresquita y consistente, especialmente en verano, te recomiendo que la saques del congelador y la desmoldes máximo 5 o 10 minutos antes de servirla, así evitarás que se funda la crema.
Ahora ya solo queda disfrutar de esta tarta tan original (¡y tan requetebuena!).
¿Qué te parece? ¿Te animas a probarla?
MIREIA
Muy buena receta!!! Yo la hago añadiendo un poco de canela en la base de galleta. Si se quiere también se puede espolvorear un poco por encima.